El sustanciero
Habían pasado tres semanas desde la detención del sustanciero, y la conmoción era enorme en el barrio. Tres semanas desde que se descubrió que el malandrín asesinaba cada fin de semana a una moza casadera de la comarca, y que ese era el secreto de aquellos huesos tan delicados con finísimos jirones de carne. Tres […]